El ingeniero que vive en un monasterio: “Me aporta mucha riqueza”
Un cambio de vida radical
El ingeniero Emilio López decidió dejar su trabajo en la ciudad para irse a vivir a un monasterio en busca de una vida más tranquila y espiritual. A pesar de las dificultades iniciales, asegura que esta experiencia le ha aportado muchísima riqueza a nivel personal.
Una nueva perspectiva
Según López, vivir en el monasterio le ha permitido conectar consigo mismo de una manera que nunca antes había experimentado. La vida en comunidad, la oración y la meditación son parte fundamental de su día a día, lo que le ha ayudado a encontrar un equilibrio que antes le era esquivo.
Retos y recompensas
Aunque reconoce que ha tenido que enfrentarse a diversos retos, como la soledad o la rigidez de la rutina, López afirma que las recompensas han sido infinitamente mayores. Su relación con los demás monjes y su crecimiento personal son aspectos que valora enormemente.
Una decisión que no todos comprenden
Para muchos, la elección de López de abandonar su vida en la ciudad para vivir en un monasterio puede parecer extraña o incluso radical. Sin embargo, él está convencido de que ha sido la mejor decisión que ha tomado en su vida y anima a otros a explorar nuevas formas de espiritualidad.
Palabras clave:
ingeniero, monasterio, espiritualidad, vida tranquila, meditación, comunidad, crecimiento personal, retos, recompensas, rutina