Bolivia en alerta: movilizaciones de Evo Morales ponen en peligro las elecciones, advierte el Gobierno ante la OEA
Tensiones políticas y violencia amenazan el proceso electoral en agosto, según la canciller boliviana Celinda Sosa
En medio de un clima de incertidumbre y conflictividad, el Gobierno de Bolivia ha emitido una seria advertencia frente a la Organización de Estados Americanos (OEA) acerca de las movilizaciones lideradas por Evo Morales, que representan una amenaza latente para la celebración de las elecciones presidenciales previstas para el próximo 17 de agosto.
Desde la sede de la OEA, la canciller boliviana Celinda Sosa expresó su preocupación por la creciente tensión social y los episodios de violencia desencadenados por la insistencia de Morales y sus seguidores en su candidatura presidencial, poniendo en riesgo el derecho fundamental de los ciudadanos bolivianos a elegir a sus representantes en un ambiente de paz y libertad.
La tensa situación en Bolivia
Los recientes bloqueos en las vías principales del país se prolongaron durante quince días, dejando un saldo trágico de seis personas fallecidas, entre ellas cuatro agentes policiales y dos civiles, así como más de 200 heridos y considerables pérdidas económicas, según reportes oficiales.
El Gobierno del presidente Luis Arce ha señalado directamente al exmandatario Morales, quien, a pesar de no contar con respaldo partidario ni cumplir con los requisitos legales para postularse, persiste en su intención de participar como candidato presidencial en los comicios.
La postura institucional
El Tribunal Constitucional Plurinacional de Bolivia ha reafirmado que Evo Morales no puede presentarse nuevamente a la presidencia, ya que la Constitución del país solo permite una reelección continua o discontinua. A pesar de esto, Morales ha declarado que su candidatura aún no está descartada, desafiando el marco legal vigente.
Ante estas tensiones, sus seguidores han amenazado con boicotear las elecciones si Morales no aparece en la papeleta, argumentando que sin su presencia no habrá legitimidad en el proceso electoral. Wilma Alanoca, candidata a la vicepresidencia por su grupo, acusó al Gobierno de intentar excluir políticamente a Morales.
El llamado a la calma y la observación electoral
En medio de las crecientes tensiones, Bolivia ha solicitado formalmente a la OEA el envío de una misión de observación electoral para garantizar que la voluntad democrática del pueblo boliviano sea respetada, evitando así repetir crisis pasadas como la ocurrida en 2019, cuando Morales renunció tras denuncias de fraude electoral.
En un escenario marcado por la polarización y las amenazas mutuas entre sectores políticos opuestos, la estabilidad y la transparencia del proceso electoral se presentan como pilares fundamentales para evitar una escalada de violencia y preservar la democracia en Bolivia.
Conclusión
Ante la compleja coyuntura política que atraviesa Bolivia, es imperativo encontrar vías de diálogo y consenso que permitan garantizar la celebración de elecciones libres y justas, en las que la voluntad del pueblo sea respetada sin menoscabo de la paz social y la estabilidad institucional del país.
La comunidad internacional, a través de organismos como la OEA, juega un papel crucial en el acompañamiento y la supervisión del proceso electoral, velando por el respeto a los principios democráticos y la no violencia como la única vía para la resolución de conflictos políticos.