Funcionaria resulta herida en la cabeza al mediar en pelea entre presos en módulo conflictivo de Zaballa
Trabajadora recibe golpe que requiere puntos de sutura al intentar calmar a internos. Plantilla, afectada por tres agresiones en último mes, protestará hoy frente a la cárcel alavesa.
Una labor riesgosa en un entorno tenso
En uno de los módulos más conflictivos de la cárcel de Zaballa, una valiente funcionaria resultó herida en la cabeza mientras intentaba mediar en una pelea entre presos. El incidente, que obligó a la trabajadora a recibir varios puntos de sutura, pone en evidencia los peligros a los que se enfrentan diariamente los empleados penitenciarios al tratar de mantener el orden y la seguridad en un entorno tenso y peligroso.
La violencia en aumento en la cárcel de Zaballa
La agresión sufrida por la funcionaria no es un hecho aislado, ya que en el último mes se han registrado tres incidentes violentos contra el personal de la prisión. Esta preocupante escalada de violencia ha generado indignación y temor entre los trabajadores penitenciarios, que exigen medidas urgentes para garantizar su seguridad y bienestar mientras desempeñan sus funciones.
Protesta y reclamo de justicia
Ante la grave situación de inseguridad que atraviesa la plantilla de la cárcel de Zaballa, se ha convocado una concentración de protesta frente a las puertas del centro penitenciario. Los trabajadores, respaldados por sindicatos y asociaciones, alzarán su voz para exigir justicia, medidas efectivas contra la violencia y un ambiente laboral seguro que les permita desarrollar sus labores sin temor a sufrir agresiones.
Un llamado a la acción y la solidaridad
Es fundamental que las autoridades competentes tomen cartas en el asunto y garanticen la integridad física y emocional de los trabajadores penitenciarios. La labor que desempeñan es crucial para el funcionamiento del sistema judicial, y es responsabilidad de todos velar por su seguridad y bienestar. La solidaridad y el apoyo a estos profesionales que enfrentan situaciones de riesgo a diario son esenciales para construir un entorno laboral más seguro y justo para todos.
Conclusión
La agresión sufrida por la funcionaria en la cárcel de Zaballa es un recordatorio impactante de los riesgos y desafíos a los que se enfrentan los trabajadores penitenciarios en su labor diaria. Es imperativo que se tomen medidas concretas para proteger a quienes velan por la seguridad y la reinserción de los internos, garantizando un ambiente de trabajo seguro y libre de violencia. La solidaridad y la acción conjunta son clave para promover un cambio positivo en el sistema penitenciario y asegurar el respeto y la protección de quienes dedican su vida a esta importante labor.