Las recientes declaraciones de José Luis Ábalos y Koldo García, reveladas en audios por la Guardia Civil, han desatado la indignación en la sociedad española. En estas grabaciones, ambos políticos del PSOE y Más Madrid, respectivamente, han hecho comentarios denigrantes y cosificadores hacia las mujeres, calificadas por el Ayuntamiento de Madrid como «nauseabundas».

Ante esta situación, el Ayuntamiento de Madrid, liderado por el PP, ha exigido públicamente a los partidos de izquierda, en particular al PSOE y Más Madrid, condenar de forma enérgica y contundente las expresiones despectivas hacia las mujeres vertidas por Ábalos y Koldo.

La gravedad de las declaraciones

Las palabras utilizadas por Ábalos y Koldo en los audios filtrados han sido catalogadas como «declaraciones pornográficas» por parte del Ayuntamiento de Madrid. En estos registros, se evidencia una clara cosificación de las mujeres, así como un trato denigrante y alejado de cualquier principio de igualdad y respeto.

Esta situación ha generado un profundo malestar en la opinión pública, que observa con preocupación cómo figuras políticas relevantes caen en discursos que promueven la desigualdad de género y la falta de respeto hacia las mujeres.

La exigencia de una condena clara

Desde ESdiario compartimos la indignación del Ayuntamiento de Madrid y nos unimos a la demanda de una respuesta inmediata por parte de la izquierda política. Es fundamental que los partidos que abogan por la igualdad y la defensa de los derechos de las mujeres se pronuncien de manera contundente ante este tipo de expresiones sexistas y degradantes.

La sociedad no puede tolerar ni normalizar discursos que menosprecian a las mujeres y las reducen a meros objetos. Es responsabilidad de los líderes políticos rechazar de forma categórica este tipo de actitudes y enviar un mensaje claro de respeto e igualdad.

Un llamado a la coherencia

Es imperativo que los partidos políticos actúen en coherencia con sus discursos y principios. La lucha por la igualdad de género no puede ser selectiva ni partidista, debe ser una causa transversal que involucre a toda la sociedad y que se refleje en las acciones y palabras de quienes ocupan cargos de responsabilidad.

Por tanto, el silencio o la tibieza ante expresiones tan repudiables como las manifestadas por Ábalos y Koldo solo contribuyen a socavar los avances conseguidos en materia de igualdad y a perpetuar estereotipos y actitudes sexistas.

Conclusión

En definitiva, la sociedad demanda coherencia, respeto y compromiso en la defensa de los derechos de las mujeres. Las palabras tienen un poder inmenso y los líderes políticos deben ser conscientes de su influencia y responsabilidad al comunicarse con la ciudadanía. Es hora de condenar sin ambages cualquier expresión que atente contra la dignidad y la igualdad, y de trabajar juntos por una sociedad más justa y equitativa para todas y todos.