Girona ejecutará la sentencia que le obliga a colgar la foto de Felipe VI pero dejando claro que la ciudad “no tiene rey”
El alcalde considera que presentar un recurso no tiene sentido ante la justicia española
La ciudad de Girona se encuentra en medio de una controversia luego de que se dictara una sentencia que la obliga a colgar la foto del rey Felipe VI en un lugar destacado del consistorio. Sin embargo, el alcalde de la ciudad ha manifestado que, si bien acatarán la orden, dejarán en claro su posición respecto a la monarquía.
El alcalde ha expresado que considera que presentar un recurso ante lo que llama «la justicia española» no tendría sentido, ya que considera que el Estado protege a la monarquía y que esta no representa los valores de la ciudad de Girona.
La postura del alcalde de Girona
Ante la decisión judicial, el alcalde ha afirmado que la ciudad colgará la foto del rey Felipe VI en cumplimiento de la sentencia, pero que lo hará dejando claro que para Girona «no hay rey». Esta acción simbólica busca reflejar el sentir de una parte de la población que cuestiona la monarquía como forma de gobierno.
Reacciones en la ciudadanía
Esta situación ha generado un debate en Girona, con opiniones encontradas entre quienes apoyan la decisión del alcalde y quienes consideran que se debe respetar la institución monárquica. La diversidad de opiniones refleja la complejidad de la relación entre la ciudadanía y la monarquía en la actualidad.
Reflexión sobre la autonomía local
El caso de Girona pone de manifiesto la tensión entre las decisiones locales y la normativa impuesta desde el ámbito nacional. La autonomía de los gobiernos locales se ve cuestionada en situaciones donde las decisiones judiciales entran en conflicto con las convicciones de la comunidad.
Conclusión
En definitiva, la decisión de Girona de colgar la foto del rey Felipe VI, pero aclarando que la ciudad «no tiene rey», representa un acto simbólico que busca expresar la postura de rechazo hacia la monarquía por parte de algunas instancias locales. Esta situación pone de manifiesto la complejidad de las relaciones entre el poder central y las autonomías locales en un contexto de diversidad de opiniones y valores.