Energía para la innovación y sostenibilidad en el sector agroalimentario
Transformando el presente para garantizar el futuro
Imagina una empresa familiar con una historia de casi un siglo, arraigada en el sector agroalimentario y en el corazón de Andalucía, que se ha convertido en la principal exportadora de aceite de oliva en España. Esta es la historia de MIGASA, una compañía que ha sabido evolucionar sin perder su esencia, apostando por la innovación y la sostenibilidad como pilares fundamentales de su crecimiento.
Con presencia en más de 120 países, MIGASA se ha posicionado como un referente internacional gracias a su compromiso con el futuro del campo y los agricultores. La combinación de innovación tecnológica, compromiso medioambiental y desarrollo territorial ha sido clave en su ascenso, marcado por la diversificación de productos, la reinversión constante y la creación de alianzas estratégicas.
La constante búsqueda de la excelencia
Para MIGASA, la innovación va más allá de la tecnología y los productos; implica una adaptación constante a las demandas del mercado y a los estándares de calidad. En un mundo globalizado y con consumidores cada vez más exigentes, la empresa ha apostado por la calidad, la sostenibilidad y la diversificación de sus productos.
Esta apuesta se traduce en el desarrollo de soluciones de valor añadido en sus aceites y productos alimenticios, integrando aceites de alta calidad en alimentos procesados que aportan salud y funcionalidad. Desde mayonesas y salsas hasta conservas vegetales, MIGASA busca satisfacer las necesidades de sus consumidores manteniendo un enfoque sostenible y de calidad.
Compromiso con la sostenibilidad y la eficiencia energética
Uno de los hitos más destacados de MIGASA es la planta de Alcolea, en Córdoba, certificada como «De Residuos a Recursos: Zero a vertedero», donde más del 95% de los residuos se reintegran en procesos productivos. Además, la compañía ha implementado paneles solares que cubren gran parte de sus necesidades energéticas, evitando la emisión de toneladas de CO2.
Otro proyecto innovador es la planta Oleosol en Pilas, Sevilla, que combina energía fotovoltaica con almacenamiento en baterías, logrando cubrir con energía solar las 24 horas de consumo de la fábrica. Esta iniciativa no solo refuerza la autosuficiencia energética, sino que también contribuye a un modelo industrial limpio y eficiente.
Además, MIGASA ha firmado acuerdos para suministrar subproductos a la producción de biocombustibles renovables, reforzando así su compromiso con la descarbonización de la cadena agroalimentaria y con la sostenibilidad energética a largo plazo.
Un enfoque en las personas y en la innovación constante
Detrás de todos estos proyectos sostenibles y eficientes se encuentran las personas. MIGASA apuesta por la profesionalización, la formación continua y la implicación activa de sus 1.500 colaboradores para garantizar una adaptación constante y una mejora continua en todos sus procesos.
La experiencia de Grupo MIGASA es un claro ejemplo de cómo la sostenibilidad y la innovación pueden integrarse de forma efectiva en una empresa agroalimentaria. Su visión estratégica, centrada en el producto, el territorio, las personas y el entorno, ha sido clave en su éxito internacional manteniendo un compromiso local y sostenible.
Conclusión: un modelo de negocio sostenible y en constante evolución
MIGASA, con su enfoque en la innovación y la sostenibilidad, ha demostrado que es posible combinar la competitividad internacional con el compromiso local, generando un impacto positivo en el sector agroalimentario y en la comunidad. Su compromiso con la calidad, la sostenibilidad y la eficiencia energética lo sitúan como un referente en la búsqueda de un modelo de negocio sostenible y responsable con el entorno y las personas.