La compra de Banco Sabadell por parte de BBVA se ve envuelta en un giro inesperado que podría cambiar por completo el curso de la operación. Ante la inminente intervención del Gobierno de Pedro Sánchez y la incertidumbre sobre posibles condiciones, la entidad catalana ha sorprendido al mercado al anunciar su intención de vender su filial británica TSB, un movimiento arriesgado que amenaza con socavar la viabilidad de la opa.

En una jugada calculada, Banco Sabadell ha recibido «indicaciones de interés preliminares y no vinculantes» para la adquisición de TSB, despertando el interés de entidades como Barclays, Banco Santander, NatWest y HSBC, según fuentes financieras citadas por el ‘Financial Times’.

El plan estratégico de Banco Sabadell

Ante la posibilidad de que la venta de TSB haga desistir a BBVA de su opa, Banco Sabadell contempla dos escenarios clave. Por un lado, la entidad catalana busca cambiar radicalmente el panorama de la operación, desafiando a BBVA a reevaluar sus estrategias si deciden desprenderse de su filial británica. Por otro lado, en caso de que la operación continúe, el capital obtenido de la venta podría utilizarse para fortalecer la posición de Sabadell y convencer a sus accionistas de permanecer independientes.

Este movimiento estratégico no solo amenaza la opa en curso, sino que plantea la posibilidad de que Banco Sabadell busque operaciones corporativas alternativas, como acercamientos a otros bancos como Unicaja y Abanca, según rumores del mercado.

Desafíos y obstáculos en el camino

La posible venta de TSB presenta desafíos adicionales debido a las restricciones normativas que rigen las operaciones en curso. Sabadell deberá obtener la aprobación de su junta de accionistas para llevar a cabo la transacción, lo cual añade incertidumbre al proceso.

Con un precio de venta estimado en más de 2.000 millones de euros, Banco Sabadell se enfrenta a un escenario complejo en el que la sincronización de la venta con el periodo de aceptación de la opa complica aún más las decisiones a tomar.

La incertidumbre de un escenario cambiante

En medio de la incertidumbre, la intervención del Gobierno y la necesidad de ajustes por parte de BBVA para cumplir con las condiciones requeridas plantean un escenario de cambios constantes. La posibilidad de que la venta de TSB se solape con el periodo de aceptación de la opa genera dudas y cuestionamientos sobre la viabilidad de la operación en su forma actual.

La Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) estará atenta a los movimientos de Banco Sabadell para garantizar el cumplimiento de las normativas vigentes en materia de opas, lo que añade un elemento más de complejidad a este intrincado proceso.

Conclusión decisiva en el horizonte

En un entorno de máxima presión y decisiones estratégicas cruciales, Banco Sabadell ha puesto sobre la mesa un movimiento que podría cambiar el rumbo de la opa de BBVA. La venta de su filial británica TSB no solo desafía la viabilidad de la operación, sino que plantea un escenario de incertidumbre y reajustes inminentes en el sector bancario. La conclusión de esta saga está aún por escribirse, pero una cosa es segura: el desenlace será determinante para el futuro de ambas entidades y del panorama financiero en general.