Joan Rovira: “El problema de los incendios es cómo está el territorio; lo hemos abandonado”
El jefe de intervención de Bombers en el fuego del Baix Ebre advierte de que el bosque no dejará de crear biomasa y reclama un “cambio social, económico y político” para que el entorno forestal vuelva a ser resiliente
Cuando Joan Rovira, jefe de intervención de Bombers de la Generalitat en el incendio del Baix Ebre, analiza la situación actual de los incendios forestales, no duda en señalar directamente al abandono del territorio como una de las principales causas de esta problemática. Según sus palabras, el bosque continuará generando biomasa de forma inevitable si no se produce un cambio significativo en la forma en que gestionamos y protegemos nuestro entorno natural.
En medio de la devastación causada por el fuego, Rovira hace un llamado urgente a la sociedad, la economía y la política para que se involucren de manera activa en la restauración de la resiliencia de los bosques. Su experiencia en el terreno le ha permitido comprender que la prevención y la acción sostenible son fundamentales para evitar tragedias como las que presenció en el Baix Ebre.
Un problema de abandono y desprotección
El testimonio de Joan Rovira pone de manifiesto la realidad a la que se enfrenta el territorio ante la falta de atención y cuidado. El incremento de la biomasa en los bosques, sumado a condiciones climáticas extremas, crea un escenario propicio para la propagación de incendios incontrolables.
La negligencia en la gestión forestal y la ausencia de medidas adecuadas de prevención sitúan a los ecosistemas en una posición vulnerable, donde el fuego se convierte en una amenaza latente que solo espera las circunstancias adecuadas para desencadenar su devastación.
La necesidad de un cambio profundo
Ante esta situación crítica, Joan Rovira destaca la urgencia de un cambio profundo en la forma en que nos relacionamos con el entorno natural. Este cambio no solo implica la implementación de medidas técnicas, sino un giro en la mentalidad colectiva que priorice la protección y el cuidado de los bosques como una responsabilidad compartida.
Es imperativo que se establezcan políticas ambientales sólidas, que se fomente la educación en materia de prevención de incendios y que se promueva la conciencia ecológica en todos los ámbitos de la sociedad. Solo a través de un compromiso conjunto será posible restaurar la salud de los ecosistemas y reducir la vulnerabilidad frente a los desastres naturales.
La llamada a la acción
Joan Rovira no solo alerta sobre las consecuencias de la inacción, sino que también invita a la reflexión y a la movilización. Su mensaje resuena como un llamado a la acción urgente, que trasciende las fronteras de lo individual para convertirse en un compromiso colectivo con el futuro de nuestro planeta.
Es hora de asumir la responsabilidad que nos corresponde, de tomar medidas concretas para proteger y preservar los bosques, garantizando así un entorno seguro y sostenible para las generaciones venideras. El legado que dejemos no solo será un reflejo de nuestras acciones, sino la base sobre la cual se construirá el futuro de la biodiversidad y el equilibrio ambiental.
Conclusión
Las palabras de Joan Rovira nos recuerdan la importancia de estar a la altura de los desafíos que enfrentamos como sociedad. El problema de los incendios forestales no es solo una cuestión ambiental, es un reflejo de nuestra relación con la naturaleza y de nuestra capacidad para protegerla.
Es momento de actuar de manera decidida, de implementar cambios significativos en nuestras prácticas y de asumir un compromiso real con la preservación del entorno. Solo a través de una acción coordinada y consciente podremos revertir la situación actual y construir un futuro en el que los incendios forestales sean una amenaza del pasado.