Un grupo de 25 países, encabezados por Reino Unido, ha levantado su voz en un unísono grito por la paz: la guerra en Gaza debe terminar de inmediato. Esta petición, que incluye a naciones aliadas de Israel y a Estados Unidos, condena enérgicamente el modelo de entrega de ayuda del Gobierno israelí y el elevado número de víctimas civiles en la región.

La situación se ha vuelto crítica, con cientos de palestinos fallecidos en las cercanías de los puntos de distribución de alimentos. Los países firmantes, entre los que se encuentran Reino Unido, Francia, Italia, Japón, Australia, Canadá, y Dinamarca, expresan su profundo rechazo hacia la distribución «a cuentagotas» de asistencia humanitaria y los actos inhumanos que han acabado con la vida de civiles, incluyendo niños.

Un llamado a la humanidad y la solidaridad

Es desgarrador ver cómo más de 800 palestinos han perdido la vida en su búsqueda desesperada por ayuda humanitaria. La negativa del Gobierno israelí a brindar asistencia esencial a la población civil es inaceptable. Desde los países firmantes se hace un llamado vehemente a Israel para que cumpla con sus obligaciones bajo el Derecho Internacional Humanitario y permita el acceso seguro y eficaz de la ayuda.

Promoviendo la solidaridad internacional

La Fundación Humanitaria de Gaza, respaldada por Estados Unidos e Israel para la distribución de ayuda, ha sido clave en esta crisis. Sin embargo, su modelo de entrega ha sido cuestionado y se ha instado a Israel a levantar las restricciones para garantizar la llegada segura de la ayuda humanitaria.

Rechazo a la violencia y la ocupación

Los países peticionarios rechazan contundentemente cualquier acción que promueva cambios territoriales en Palestina. La construcción de asentamientos en Cisjordania y la violencia contra los palestinos deben cesar de inmediato. Se insta a Israel a respetar el derecho internacional y la solución de dos Estados para lograr una paz duradera en la región.

Conclusión: Un clamor por la paz y la justicia

La petición de estos 25 países, entre los que se encuentra España, es un llamamiento a la humanidad, a la solidaridad y a la justicia. El fin de la guerra en Gaza es urgente y necesario para evitar más sufrimiento y pérdidas humanas. Es momento de actuar en favor de la paz y el respeto a los derechos humanos en la región.