¡Pogacar arrasa en Hautacam y se corona campeón del Tour!

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Pogacar arrasa en el Tour de Francia en Hautacam

El día que cambió el curso del Tour 2025

La expectación se palpaba en el aire cuando el Tour de Francia 2025 llegó a los Pirineos, y la montaña confirmó su papel decisivo en una jornada emocionante que vio a Tadej Pogacar recuperar el liderato de forma contundente. Su rival, Jonas Vingegaard, queda rezagado a más de tres minutos en la clasificación general (3:31) después de que su equipo flaqueara en la primera subida de un recorrido desafiante, marcado por el intenso calor.

Los primeros 122 kilómetros de la etapa transcurrieron en terreno llano, hasta el inicio del primer gran puerto del día, el Soulor. En una etapa marcada por altas temperaturas y un ritmo frenético, un corte masivo separó a casi 50 corredores destacados, entre ellos figuras como Van der Poel, Alaphilippe, O’Connor, Storer, Woods, Vlasov, Romeo, Castrillo y la promesa española Carlos Rodríguez.

La batalla en las montañas pirenaicas

La ascensión al Soulor resultó demoledora, reduciendo el grupo de cabeza de 50 a 15 ciclistas. Incluso el favorito Remco Evenepoel se descolgó, incapaz de soportar el ritmo impuesto por el equipo Visma. Con Bordères y el temible Hautacam aún por delante, la etapa prometía emociones fuertes en un Tour que apenas comenzaba su desafío de alta montaña.

En el descenso, la carrera se volvió aún más intensa, con ataques y estrategias que definirían el destino de los ciclistas. La subida final a Hautacam, un puerto de Categoría Especial, se convirtió en el escenario decisivo donde Tadej Pogacar escribiría una nueva página de gloria en su carrera.

El triunfo de Pogacar y la venganza en Hautacam

En una impresionante exhibición de fuerza y estrategia, Pogacar se destacó en la subida a Hautacam, dejando atrás a sus rivales y consolidando su liderato en el Tour. Con un rendimiento magistral, el esloveno logró sacar una ventaja considerable sobre Vingegaard, quien se vio superado en todos los frentes por el arrollador poderío de Pogacar.

La victoria en Hautacam significó para Pogacar una revancha personal, recordando la edición pasada donde Vingegaard lo había superado en ese mismo puerto. Con determinación y talento, Pogacar demostró una vez más por qué es uno de los ciclistas más dominantes del pelotón actual.

Un espectáculo de coraje y pasión en las montañas francesas

La etapa en Hautacam no solo fue un desafío físico, sino también una prueba de resistencia mental y emocional para los ciclistas. Con ataques, caídas y momentos de gloria, el Tour de Francia en los Pirineos ofreció un espectáculo inolvidable que quedará grabado en la memoria de los aficionados al ciclismo.

El dominio de Pogacar, la lucha de Vingegaard y la valentía de otros competidores como Evenepoel y Almirall, conformaron un día épico en las montañas francesas. El ciclismo en su máxima expresión, desafiando los límites y celebrando la grandeza de este deporte tan apasionante.

Una lección de determinación y superación

El Tour de Francia en Hautacam no solo fue un capítulo más en la historia de la competición, sino un recordatorio de la grandeza y la imprevisibilidad del ciclismo. Con Pogacar brillando en lo más alto, Vingegaard luchando contra la adversidad y el pelotón entregando todo en cada pedalada, el Tour demostró una vez más por qué es una de las pruebas más desafiantes y emocionantes del mundo deportivo.

En cada curva, en cada ascenso, en cada sprint, los ciclistas escribieron su propia epopeya en las montañas pirenaicas, dejando al público con el corazón en un puño y la emoción a flor de piel. El ciclismo, un deporte de valientes y soñadores, donde cada pedalada es un desafío y cada meta, una victoria.

El legado de un día inolvidable en el Tour de Francia

La gesta de Pogacar en Hautacam quedará grabada en la memoria de los amantes del ciclismo como una actuación magistral y emocionante. Un día que redefinió las clasificaciones, quebró rivales y elevó el espíritu competitivo de una competición legendaria como el Tour de Francia.

Con la emoción a flor de piel y la pasión desbordante, los ciclistas escribieron una nueva página de gloria en las montañas francesas, recordándonos que en el ciclismo, al igual que en la vida, la determinación y la superación son las claves para alcanzar la cima. ¡Que viva el Tour, que viva el ciclismo!

Prensa24.es