En un movimiento audaz y decidido, el Insolac Caja 87 ha dado un giro significativo en su estrategia deportiva al perfilarse con la renovación de Adrián Latorre y la despedida de Ken Baoko, dos piezas clave en el juego interior del equipo. Estas decisiones marcan un hito en la planificación del club, que busca potenciar su segunda plantilla en la historia con jugadores de alto rendimiento y proyección.

Adrián Latorre, pívot nacido en Soria, se alza como una apuesta de futuro para el equipo. Con tan solo 23 años, Latorre ha demostrado su valía en la cancha, promediando 4,4 puntos y 4,3 rebotes por partido. Su versatilidad y juventud lo convierten en un activo invaluable para el Insolac Caja 87, que ve en él un jugador en constante crecimiento y mejora.

El legado de Baoko y el nuevo rumbo del equipo

Por otro lado, la salida de Ken Baoko, quien aportaba un plus físico y atlético al equipo en los tableros, marca el final de una etapa en el club. Con una contribución de 6,5 puntos y 3,4 rebotes por encuentro, Baoko deja una huella en el equipo, alternando momentos brillantes con otros más discretos.

Con la renovación de Latorre, el Insolac Caja 87 redefine su batería interior, conformada por jugadores de la talla de Okafor, Dibba, Jankovic y el propio Latorre. La versatilidad de Dedovic, capaz de desempeñarse como alero o ala-pívot, añade profundidad al equipo y flexibilidad táctica ante diferentes rivales.

Un futuro prometedor

El panorama de fichajes del club apunta a la incorporación de un base y otro perimetral, completando así una plantilla sólida y competitiva. Franch, Bertain, Bilalovic y Joaquín Cebolla se suman a la línea exterior del equipo, que se prepara para afrontar la nueva temporada con ambición y determinación.

Con una planificación acelerada y una visión clara de futuro, el Insolac Caja 87 se posiciona como un equipo en constante evolución, dispuesto a dar un salto cualitativo en su rendimiento. Los movimientos estratégicos realizados hasta la fecha reflejan un compromiso con la excelencia deportiva y la construcción de un equipo competitivo en la categoría.

Conclusión

La renovación de Latorre y la despedida de Baoko marcan un antes y un después en la historia del Insolac Caja 87, que apuesta por la juventud, el talento y la ambición para alcanzar sus metas deportivas. Con una plantilla en constante transformación y un enfoque estratégico claro, el club se prepara para afrontar nuevos retos y consolidarse como un referente en la competición. El futuro se presenta prometedor para el equipo, que avanza con paso firme hacia una temporada llena de desafíos y oportunidades.