El incendio declarado en Navaluenga, Ávila, ha mantenido un perímetro de 26 kilómetros, pero las noticias son alentadoras: el perímetro apenas ha variado durante la noche, lo que indica una estabilización en la situación, según Álvaro Gómez, director técnico de extinción.

Las labores realizadas durante la noche se han centrado en reforzar y asegurar el perímetro afectado. A pesar de ello, desde el operativo advierten que aún queda mucho trabajo por delante, especialmente ante el pronóstico de aumento de viento y temperaturas elevadas a lo largo del día.

Las condiciones meteorológicas y la lucha contra el fuego

Álvaro Gómez señaló que la virulencia del viento fue un factor complicado en las primeras horas del incendio, afectando a una zona de gran riqueza natural habitada por aves como águilas y milanos. Sin embargo, se espera una ligera disminución en la velocidad del viento, aunque se mantendrá la misma dirección.

El alcalde de Navaluenga, Armando García, informó que la situación actual es más tranquila, pero se mantiene la alerta máxima debido a la posibilidad de que los focos activos se reactiven con el viento. La peor situación meteorológica se espera entre el mediodía y la tarde.

Trabajo incansable para controlar el incendio

El despliegue de recursos para combatir el incendio ha sido masivo, con más de 200 operarios trabajando durante la noche para enfriar los puntos calientes y evitar la propagación del fuego. La Unidad Militar de Emergencias (UME) ha desplegado 102 militares y 49 medios para apoyar las labores de extinción.

Actualmente, más de 60 medios terrestres y aéreos continúan en la zona, realizando labores de refrescamiento en zonas de difícil acceso y cerca de áreas urbanas. A pesar de los avances, se mantiene la vigilancia constante para evitar posibles rebrotes.

Impacto y medidas preventivas

Los vecinos desalojados podrían regresar pronto a sus hogares, mientras que los niños y monitores de un campamento han pasado la noche en un polideportivo a la espera de ser recogidos. Las autoridades han cortado varias carreteras secundarias debido al humo y polvo, con la esperanza de restablecer la circulación pronto.

El alcalde García confía en que, si las condiciones meteorológicas no empeoran, la situación se mantendrá bajo control a lo largo del día. A pesar de los daños materiales, se destaca la ausencia de víctimas humanas, lo que refuerza el agradecimiento por el esfuerzo conjunto de los equipos de emergencia.

Conclusión: Trabajo en equipo y esperanza ante la adversidad

El incendio en Navaluenga ha sido un desafío para todos los involucrados, pero la coordinación y el esfuerzo conjunto han marcado la diferencia. A medida que las condiciones mejoran, la comunidad se mantiene en alerta, unida en la esperanza de que el trabajo incansable de los equipos de emergencia logre controlar completamente la situación.