Los hongos que vencieron ejércitos en Rusia

Los aliados inesperados de la madre Rusia

Durante dos momentos decisivos en la historia, dos variedades de hongos jugaron un papel crucial en la derrota de poderosos ejércitos invasores en territorio ruso. En las campañas de Napoleón en 1812 y de Hitler en 1941, los hongos Amanita muscaria y Clitocybe nuda tuvieron un impacto sorprendente en las estrategias militares.

El hongo rojo que paralizó a Napoleón

Durante la invasión napoleónica, los soldados franceses consumieron el hongo Amanita muscaria creyendo que les brindaría fuerza y valor. Sin embargo, desconocían sus efectos alucinógenos que los hicieron delirar y perder el control, lo que contribuyó a la retirada del ejército francés y al fracaso de la campaña.

La estrategia micológica en la Segunda Guerra Mundial

En la Segunda Guerra Mundial, durante la invasión alemana a Rusia, los hongos Clitocybe nuda crecieron en abundancia en los bosques de la región. El ejército ruso empleó este hongo para contaminar la comida de las tropas enemigas, provocando severas intoxicaciones que minaron su fuerza y capacidad de combate.

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