Eslas son la grieta
La Polarización Creciente y el Ascenso de la Ultrarerecha
La descripción histórica del inicio del siglo XXI puede presentar paralelismos con los años treinta del siglo XX y la República de Weimar. La creciente polarización en todo el mundo y los episodios de violencia y el ascenso de la ultraderecha en Europa generan temor. Este crecimiento ultraconte con la complicidad de los populares europeos, como se ve en la inacción de la presidenta saliente de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, al no criticar adecuadamente los centros de internamiento para inmigrantes promovidos por Giorgia Meloni en Albania, similar a un «Guantánamo en Europa». Además, el continuo asesinato de civiles en Gaza es insoportable.
La Grieta de la Esperanza
Es en este contexto que las mujeres pioneras juegan un papel fundamental. Figuras como Claudia Sheinbaum, futura presidenta de México, feminista, científica, ecologista y judía, iluminan el presente. Otro ejemplo son las jugadoras del Barça: Alexia Putellas, Aitana Bonmatí e Irene Paredes están logrando una revolución cultural. Su compromiso social y formación deberían hacer que sus compañeros masculinos se sientan avergonzados. Estas jugadoras están empoderando a niñas y mujeres en todo el mundo.
Un Futuro de Esperanza
Hay dos corrientes poderosas: una nostálgica del pasado, reaccionaria, que promueve odio contra mujeres, LGTBI e inmigrantes; y otra que mira hacia el futuro, guiada por estas mujeres pioneras, que enseñan a nuestras hijas e hijos el valor de la sororidad y la igualdad. Aunque los resultados de las elecciones europeas son pavorosos, el a continuo empoderamiento de estas mujeres nos debe llenar de esperanza. Su actuación dependerá de nosotros para frenar la ola reaccionaria y ensanchar la grieta llena de luz.