En una impactante operación policial, la Policía Nacional y la Guardia Civil han logrado desmantelar una red delictiva en Madrid dedicada a estafar a través de anuncios falsos de venta de coches en portales online. Esta red operaba las 24 horas del día con una estructura piramidal y al menos 69 líneas telefónicas, engañando a cientos de personas con la promesa de coches a precios irresistibles.

La operación denominada Firebird ha arrojado un total de 12 detenidos y 13 registros en la provincia. Se estima que esta red ha causado un perjuicio económico de más de 380.000 euros a 175 víctimas identificadas hasta el momento, aunque se espera que esta cifra aumente a medida que avance la investigación para identificar a más afectados.

El modus operandi de la red delictiva

La organización criminal, que llevaba operando desde enero de 2024, publicaba anuncios falsos de vehículos de ocasión en páginas de compraventa online, ofreciendo precios muy por debajo del valor real del mercado. Una vez que las potenciales víctimas contactaban con ellos, les solicitaban transferencias para la reserva de los coches y datos personales bajo falsos pretextos. Incluso llegaban al extremo de amenazar con estafas utilizando las identidades de las personas engañadas anteriormente.

Para dar credibilidad a la estafa, operaban como un auténtico call center con múltiples líneas telefónicas, simulando ser diferentes departamentos de una empresa ficticia. Además, proporcionaban contratos falsificados para dar apariencia de legalidad a la transacción, suplantando la identidad de una reconocida empresa de compraventa de vehículos.

La desarticulación de la red y las detenciones

Tras una exhaustiva investigación, se descubrió que la organización tenía una jerarquía bien definida, liderada por ocho personas que se encargaban de recolectar el dinero. Tras la detención de 12 implicados, incluidos los líderes y recolectores de dinero, se logró incautar más de 73.000 euros en efectivo, vehículos, dispositivos electrónicos, armas y numerosas tarjetas bancarias vinculadas a la trama.

Los detenidos enfrentan cargos por pertenencia a organización criminal, estafa, usurpación de estado civil, falsedad documental y blanqueo de capitales. Seis de ellos han sido enviados a prisión provisional, mientras que se han bloqueado 81 cuentas bancarias pertenecientes a los principales investigados.

Conclusión: justicia contra la estafa en línea

La desarticulación de esta red de ‘call centers’ es un duro golpe contra la estafa en línea y un mensaje claro de que las autoridades están vigilantes ante este tipo de actividades criminales. Con 175 víctimas identificadas y un perjuicio económico significativo, se espera que esta operación sirva como ejemplo disuasorio para aquellos que intentan engañar a través de la red.

La lucha contra el cibercrimen continúa, y es fundamental que los usuarios extremen la precaución al realizar transacciones en línea y verifiquen la autenticidad de las ofertas antes de realizar cualquier pago. Solo así podremos construir un entorno digital más seguro y confiable para todos.