La Federación Nacional Empresarial de Alquiler de Vehículos (FENEVAL) ha expresado su rechazo ante la proposición de ley presentada por el Consell de Mallorca, la cual busca limitar la circulación de vehículos en la isla y contempla multas de hasta 30.000 euros para los infractores. Esta medida ha generado una profunda preocupación en el sector del alquiler de coches, que ve en ella una amenaza directa a sus operaciones en la región.

Desde FENEVAL se destaca la falta de información precisa sobre el parque circulante de vehículos en Mallorca. La patronal solicita la recopilación de datos actualizados antes de implementar medidas restrictivas, con el objetivo de tomar decisiones fundamentadas y evitar errores previamente observados en Ibiza. En la isla vecina, los estudios iniciales resultaron ser inexactos tras el proceso de solicitudes, lo que generó complicaciones adicionales.

Restricciones propuestas y su impacto

El borrador de la ley, cuya entrada en vigor está programada para el verano de 2026, se enfoca en los vehículos no domiciliados en Mallorca. Esto puede afectar significativamente a empresas de Rent a Car y a no residentes, generando preocupación en el presidente ejecutivo de FENEVAL, Juan Luis Barahona. Barahona advierte que esta normativa limita la libertad de movimiento en España y perjudica los intereses económicos de las empresas del sector, exigiendo que las administraciones asuman responsabilidad por las posibles consecuencias económicas derivadas de la decisión.

La medida contempla no solo la limitación de la propiedad de vehículos mediante una tasa para aquellos que no tributan en Baleares, sino también la implementación de un cupo anual o bianual con preferencia para los vehículos menos contaminantes. Sin embargo, esto choca directamente con la realidad de las flotas de Rent a Car, donde la mayoría de los vehículos ya son considerados ECO, lo que lleva a FENEVAL a considerarla como una medida discriminatoria hacia su modelo de negocio.

Impacto en residentes no permanentes

La normativa también afectará a propietarios que, a pesar de tener una vivienda en Mallorca, no residen de forma permanente en la isla. Estas personas deberán contar con un vehículo fiscalmente inscrito en el domicilio insular y solo podrán disponer de un coche por vivienda, limitando sus opciones de movilidad. FENEVAL destaca la importancia de adaptar el sistema de movilidad de la isla antes de reducir drásticamente el número de vehículos de alquiler, argumentando que esta reducción no resolverá la saturación turística que el Consell pretende mitigar.

Conclusión

La incertidumbre persiste sobre la aplicabilidad y duración de estas medidas, lo que aumenta la preocupación en el sector. FENEVAL solicita un diálogo urgente con el Consell de Mallorca para evitar la aprobación de una normativa que podría tener graves consecuencias económicas y operativas para la isla. Es fundamental tomar decisiones informadas y considerar el impacto real de las restricciones propuestas antes de implementarlas de manera definitiva.