Cerdán y su participación en una empresa vinculada al cobro de mordidas de obra pública
Una investigación revela detalles impactantes sobre la conexión del exsecretario de Organización del PSOE con el escándalo
El escándalo de corrupción en torno a la adjudicación de obras públicas en España ha dado un giro inesperado con la revelación de un documento que señala la participación de Santos Cerdán, exsecretario de Organización del PSOE, en una de las empresas supuestamente involucradas en el cobro de mordidas. De acuerdo con la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil, Cerdán sería propietario del 45% de Servinabar, compañía que habría recibido contratos públicos de carreteras durante la gestión de José Luis Ábalos al frente del Ministerio de Transportes.
El documento encontrado durante un registro en el domicilio de un cercano colaborador de Cerdán en Elorrio (Vizcaya) revela una escritura de compraventa de participaciones sociales firmada en junio de 2016. En esta transacción, se especifica que Cerdán adquirió 1.350 participaciones de las 3.000 que conforman Servinabar, poniendo en evidencia su vínculo con la empresa bajo investigación.
La trama de corrupción al descubierto
Servinabar, una de las firmas en el centro de la investigación del Tribunal Supremo por presuntas mordidas en el sector de la obra pública, habría formado una Unión Temporal de Empresas (UTE) con Acciona para la realización de trabajos en Belate (Navarra). Esta asociación habría sido parte de un entramado de corrupción que habría implicado a Cerdán, Ábalos y su asesor, Koldo García.
El reciente registro realizado por la Guardia Civil en las instalaciones de Servinabar reveló la existencia de 16.180 euros en efectivo, distribuidos en diferentes denominaciones. Este hallazgo, sumado a las declaraciones de testigos colaboradores, apunta a la presunta trama de corrupción que habría operado en torno a la empresa y sus vínculos políticos.
El testimonio comprometedor
Durante su comparecencia voluntaria ante la Audiencia Nacional, Víctor de Aldama, comisionista investigado en el caso, mencionó la influencia de Cerdán en Navarra y el País Vasco, donde se habrían solicitado mordidas a cambio de contratos públicos. Aldama señaló que entregó una suma de dinero a Koldo García para que llegara a manos de Cerdán, aunque esta información aún está por confirmarse.
El testimonio de Aldama pone de manifiesto la presunta operación de cobro de sobornos y favores en la gestión de obras públicas, involucrando a prominentes figuras políticas como Santos Cerdán, cuya participación en Servinabar arroja luz sobre un entramado de corrupción que aún está por esclarecerse por completo.
Conclusiones contundentes
El escándalo que rodea a Santos Cerdán y su presunta conexión con el cobro de mordidas en la adjudicación de obras públicas ha puesto en entredicho la transparencia y la ética en la gestión política. Las revelaciones recientes evidencian la necesidad de una exhaustiva investigación para esclarecer los hechos y llevar a los responsables ante la justicia, garantizando la integridad y la legalidad en el ámbito público.