Los linces convierten un cementerio de Jaén en su hogar
Una madre lince y sus crías sorprenden a los habitantes de Espeluy
Hace pocos años, cada lince de la península ibérica tenía nombre propio, una forma de humanizar a una especie que requería una urgente intervención para su recuperación. Sin embargo, hoy la población de linces ha crecido de manera significativa, pasando de estar en peligro crítico a ser considerada una especie «vulnerable» por la UICN. En España, específicamente en Jaén, se estima que hay alrededor de 500 ejemplares.
Desde las alturas de Sierra Morena hasta las dehesas y llanuras de Jaén, los linces han encontrado nuevos territorios donde establecerse. Recientemente, una madre lince y sus crías han llamado la atención al hacer del cementerio de Espeluy su lugar de descanso.
Una escena inusual en el camposanto
Una vecina de Espeluy se topó con la inusual escena de los linces paseando entre lápidas y nichos en el cementerio. Las crías jugaban mientras la madre bebía agua, generando un revuelo en el pueblo. La falta de lluvias en la zona habría motivado a la familia felina a buscar agua en este peculiar lugar.
Adaptación al entorno humano
Los avistamientos de linces en los alrededores de Espeluy se han vuelto más frecuentes en los últimos años, mostrando una adaptación sorprendente al entorno humano. Incluso se han registrado momentos de tranquilidad y despreocupación de las crías jugando entre las piezas de una fábrica cercana.
Medidas de protección y convivencia
Tras un incidente donde dos crías fueron atropelladas, el ayuntamiento instaló un radar de velocidad para prevenir accidentes en la zona. El alcalde de Espeluy destaca la necesidad de señalizar adecuadamente la presencia de linces en la región, demostrando el compromiso de proteger a estos nuevos vecinos.
El lince ibérico: un símbolo de éxito y aceptación
La recuperación del lince ibérico en solo 25 años ha sido un logro impresionante, no solo en términos de conservación, sino también de aceptación social. De ser considerado una amenaza, hoy es motivo de orgullo para Espeluy y sus habitantes, quienes reciben la presencia de estas majestuosas criaturas como un regalo de la naturaleza.
Conclusiones
La presencia de la familia de linces en el cementerio de Espeluy resalta la importancia de la conservación de esta especie emblemática. La convivencia armoniosa entre humanos y linces en la región de Jaén es un ejemplo de cómo la protección del medio ambiente puede conducir a resultados positivos tanto para la biodiversidad como para la comunidad local.