La etapa entre Loudenvielle y Peyragudes fue testigo de la imponente actuación de Tadej Pogacar, consolidando su dominio en el Tour de Francia. Con una ventaja de más de cuatro minutos sobre Vingegaard, el esloveno demostró su superioridad en la montaña y contra el reloj.

Desde el inicio de la cronoescalada, Pogacar marcó el ritmo, con Vingegaard en segundo lugar y Roglic en tercero. A pesar de la corta distancia, el veterano esloveno exhibió su clase, mientras que otros como Remco Evenepoel sufrieron dificultades inesperadas.

Rendimiento destacado y sorpresas en la etapa

Destacando el rendimiento de Lipowitz, un ciclista en ascenso, y el buen desempeño de Carlos Rodríguez como el mejor español clasificado, la etapa también vio a Luke Plapp demostrar su dominio en la modalidad contra el reloj.

Adam Yates y Lenny Martinez se destacaron como excepciones en un pelotón que reservó energías para las duras etapas montañosas por venir, incluyendo el temible encadenamiento de Tourmalet, Aspin, Peyresourde y Supernagnères.

Un líder imparable

Tras la veloz cronoescalada de Pogacar, la sensación general es que el líder esloveno está encaminado a destruir las esperanzas de sus rivales más cercanos y consolidarse como uno de los mejores ciclistas de la historia, con tan solo 26 años y 30 victorias en grandes vueltas.

La ascensión a Peyragudes, con su historia en el Tour de Francia, sirve como escenario para la brillante actuación de un ciclista que parece destinado a marcar una era en el ciclismo mundial.